60 segundos – Integridad

Zig Ziglar afirmó: «La herramienta de persuasión más importante que tienes en todo tu arsenal es la integridad». La palabra integridad significa «totalidad». En matemáticas, un entero es un número que no se divide en fracciones. Así, integridad significa que un hombre no está dividido ni en su corazón ni en su conducta.

El antiguo Job dijo, «Hasta que muera no apartaré de mí mi integridad,» Job 27:5. La palabra que usó aquí para integridad significa, «íntegro, recto y lleno en medida». En el Salmo 26, David declaró que comenzó en integridad y terminará en integridad. En el versículo uno, dice: «HEMOS caminado en mi integridad», y concluye: «CAMINARÉ en mi integridad». Había aprendido que la integridad debía regir su vida.

Se hizo un estudio con más de 40 ejecutivos, algunos de los cuales habían sido despedidos, u obligados a jubilarse anticipadamente, y otros que habían llegado hasta la cima. Todos poseían un talento extremo y notables puntos fuertes, pero adolecían de una o más debilidades. Sin embargo, un estudio más detallado reveló que un cierto tipo de defecto seguía apareciendo en un gran número de ellos, y que un error, cuando se cometía, siempre conducía a su desaparición. Los investigadores lo llamaron «el pecado imperdonable: traicionar una confianza». Su falta de coherencia y previsibilidad construida a lo largo del tiempo que dice: «Cumpliré mi palabra, y puedes contar conmigo», es lo que arruinó sus carreras.

Alan Simpson dijo: «Si tienes integridad, nada más importa. Si no tienes integridad, nada más importa».

A John Bunyan, autor de «El progreso del peregrino», tras pasar años en la cárcel de Bedford por convicciones religiosas, el magistrado le ofreció ser puesto en libertad si cesaba en sus prédicas sobre la libertad religiosa. Él respondió: «Dejaré que me crezca el musgo de las cejas antes de hacer un matadero de mi conciencia o una carnicería de mis principios».

Chuck Swindoll nos recuerda: «La verdadera integridad se mantiene tanto si la prueba es la adversidad como la prosperidad».