Día 335: Dónde buscar
Escritura de hoy: Salmo 121:1-2
Pensamiento central: La mejor fuente de ayuda es Aquel que nos creó.
Cuando David miró las colinas que rodeaban Jerusalén, vio el poder creativo de Dios. Esto le recordó a David que el Creador del cielo y la tierra también había creado su vida y que no había mejor fuente de ayuda en tiempos difíciles que el propio Creador.
David, por supuesto, no necesitaba ver colinas para este recordatorio. Podría haber visto la obra de Dios sobre un océano, o a través de una extensa llanura, o incluso en el árido entorno de un desierto.
La clave para nosotros en momentos aparentemente desesperados como los que experimentó David es dónde no buscar ayuda: en nosotros mismos. Debemos mirar a Aquel que nos creó. Por supuesto, a menudo creamos un problema y creemos que es justo que lo resolvamos. Pero Dios nos conoce mejor que nosotros mismos y quiere que acudamos a Él en busca de ayuda.
Para ayudarte a recordar eso, mira a tu alrededor. ¿Qué ves que indique que Dios está obrando? ¿Hay algo que puedas hacer por ti mismo que tu Creador no pueda hacer mejor?
Oración devocional: Gracias, Padre, por ser mi fuente de ayuda. Perdóname por las veces que he buscado ayudarme a mí mismo en lugar de recurrir a Ti.
Lectura bíblica de hoy: Daniel 9:1-11:1; 1 Juan 2:18-3:6; Salmo 121:1-8; Proverbios 28:27-28