Día 339: No nos dejamos sacudir

Escritura de hoy: Salmo 125:1-5

Pensamiento central: Nuestra confianza en Dios nos ayudará a no ser sacudidos en nuestra fe.

El daño fue devastador. Pueblos enteros fueron arrasados, y con ellos familias enteras. El poder destructivo desatado por los tsunamis en las zonas costeras del Océano Índico dejó a las naciones sacudidas por el miedo. Aunque muchas naciones enviaron personal médico, trabajadores de la reconstrucción, mucho dinero y suministros para ayudar a estas zonas, el daño emocional causado por estas olas permanece.

Mientras los fieles subían al monte Sión en la lectura de hoy, cantaban este recordatorio de que aquellos que confían en Dios son como la estabilidad de la montaña que estaban escalando. Se dieron cuenta de que, así como las montañas rodeaban su amada ciudad, el Señor rodeaba a su amado pueblo y lo protegía. Dios nunca permitiría que los injustos perduraran, pero siempre sostendrá a su pueblo.

Como hijos de Dios, también somos bendecidos por Sus promesas de protección. Hay muchos desafíos en la vida que nos harían temblar en nuestra fe si les diéramos esa oportunidad. Debemos ser como los fieles en su camino hacia el Monte del Templo. Dios nos ha ayudado muchas veces en el pasado y está dispuesto a ayudarnos con los desafíos que enfrentamos hoy. Démosle gracias por esa ayuda.

Oración devocional: Ayúdame, Señor, a permanecer firme en mi camino contigo.

Lectura bíblica de hoy: Oseas 4:1-5:15; 2 Juan 1-13; Salmo 125:1-5; Proverbios 29:9-11

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