60 segundos – Ira incontrolada

Proverbios 14:17 dice: «Una persona de temperamento rápido actúa neciamente».

Gloria Owen, de San José, California, dijo que un día había estado buscando aparcamiento durante 10 minutos, mientras llevaba a su madre a una visita médica. Por fin encontró uno y vio que Edna Gilliam se le adelantaba. Las dos mujeres salieron de sus coches.

La Sra. Gilliam dijo que la Sra. Owens la agarró del jersey y la tiró al suelo, hospitalizando a la Sra. Gilliam durante seis semanas. La Sra. Owens se declaró culpable de agresión y fue condenada a tres años de libertad condicional. La Sra. Owens tenía 68 años y la Sra. Gilliam 88.

Esto nos recuerda el proverbio chino: «El tórrido sol derrite las nieves de las montañas. Cuando llega la ira, se va la sabiduría».

La Biblia deja claro que ese tipo de ira está prohibida. Santiago escribió: «La ira del hombre no obra la justicia de Dios», Santiago 1:20. Pablo nos ordena desechar «la ira, la malicia y la calumnia», Colosenses 3:8.

Cicerón dijo que cuando la ira entraba en escena, «nada podía hacerse rectamente y nada sensatamente». Séneca llamó a la ira «una breve locura». Proverbios 12:16 declara que la ira es una cualidad de los necios, y Eclesiastés 7:9 confirma que, «La ira reposa en el seno de los necios.»

Charles Buxton dijo: «El mal genio es su propio azote. Pocas cosas son más amargas que sentirse amargado. El veneno de un hombre se envenena a sí mismo más que a su víctima».

Las palabras «ira» y «angina» están relacionadas. Hace mucho tiempo, la gente se dio cuenta de que los dolores de pecho solían seguir a los arrebatos de ira. Además, los personajes de las novelas victorianas, descritos como iracundos y con la cara roja, sufrían a menudo apoplejía, lo que ahora llamamos infarto.

Un estudio realizado por la Facultad de Medicina de Harvard reveló que durante las dos horas siguientes a un arrebato de ira, el riesgo de sufrir un infarto se duplica en algunas personas. Proverbios 27:3, «Pesada es la piedra, y pesada la arena; pero la ira del necio es más pesada que ambas».

Recuerda: «El temperamento, si no se gobierna, gobierna a todo el hombre».

Proverbios 16:32 informa: «El que es lento para la ira es mejor que el poderoso, y el que gobierna su espíritu que el que toma una ciudad».

Una mujer le habló a Billy Sunday sobre su temperamento. Dijo que era malo, pero que se le pasaba en un minuto. Billy Sunday le contestó: «También lo es una escopeta, ¡pero lo hace todo pedazos!».

Santiago 1:19, «Que todo hombre… sea lento para la ira».