Determinación invencible

Emerson escribió: «El mundo pertenece a los enérgicos».

Sir Thomas Buxton estuvo de acuerdo cuando dijo,

«Cuanto más vivo, más profundamente me convenzo de que lo que marca la diferencia entre un hombre y otro, el grande y el insignificante, es la energía; esa determinación invencible, un propósito que una vez formado, nada puede arrebatarlo. Esta cualidad energética hará cualquier cosa que Dios quiera que se haga en este mundo, y ningún talento, ningún entrenamiento, ninguna oportunidad, ninguna circunstancia hará que ningún hombre carezca de ella».1

«Así que retengamos sin vacilar la esperanza que abrigamos, y confesemos nuestro reconocimiento de ella, porque Aquel que prometió es confiable (seguro), y fiel a Su palabra» (Hebreos 10:23).

«La fe en la Biblia es siempre algo que llega hasta Dios; a través del humo de la batalla, a través de la oscuridad y la miseria que nos asaltan, a través de la oscuridad de la hora, a través de las fuerzas amenazadoras del mal que parecen tan desenfrenadas – a través, y más allá de eso, detrás de eso, es más, por encima de eso, hasta Dios.