Día 140: Decisiones precipitadas
Escritura de hoy: 1 Samuel, capítulos 24 y 25

Pensamiento central: Dios a menudo nos libra de llevar a cabo nuestras decisiones precipitadas, incluso cuando estaríamos justificados para hacerlo.
¿Puede alguien decir que David no estaría justificado al acabar con su enemigo, Saúl? ¡Aquí está la oportunidad perfecta! Todo el pueblo apoya la acción y la alienta. ¿Cómo podría alguien dejarla pasar?
El corazón de David se llena de tristeza porque corta una parte de la túnica del rey Saúl. Podría haber cortado la cabeza del rey, y sus seguidores le animaron a hacerlo; pero David reconoció que Dios había elegido a Saúl para dirigir a su pueblo. Dependía de Dios destituir a Saúl. ¡Y no necesitaba la ayuda de David!
Más tarde, en la historia de David y Nabal, David se enfundó precipitadamente sus armas y se dispuso a atacar a su ingrato compatriota. La esposa de Nabal actuó con sabiduría y compasión cuando proporcionó comida y bebida a David y sus hombres como agradecimiento por la protección que habían brindado a los rebaños y pastores de Nabal. ¡Y Dios se ocupó de Nabal!
Oración devocional: Padre, líbranos de nuestras decisiones precipitadas. Ayúdanos a vivir vidas santas y justas ante Ti. Que siempre amemos a nuestros enemigos así como a nuestros amigos y oremos por todos ellos.
Lectura bíblica de hoy: 1 Samuel 24:1-25:44; Juan 10:22-42; Salmo 116:1-19; Proverbios 15:20-21
