Día 19: ¿Son fuertes tus raíces?
Escritura de hoy: Mateo 13: 23
Pensamiento central: Algunas plantas deben desarrollar un sistema de raíces tenaz para sobrevivir en el suelo donde se plantan.
No todas las semillas que se siembran o plantan brotan, y muchas de las plantas jóvenes que brotan pronto se marchitan y mueren.
Cuatro factores contribuyen al éxito o al fracaso de una planta para emerger y prosperar: la semilla, el suelo, el sol y el sistema radicular.
En primer lugar, la semilla que se planta determinará el tipo de planta que emergerá.
En segundo lugar, la condición del suelo determinará las posibilidades de que la planta joven viva y crezca.
En tercer lugar, el sol ayudará o dificultará el crecimiento de la planta.
Y, en cuarto lugar, la tenacidad del sistema radicular de la planta determinará si puede sobrevivir en su entorno.
Una planta no tiene control sobre su origen, el suelo en el que se planta o la cantidad de luz solar que recibirá. Pero algunas plantas pueden sobrevivir incluso en las peores condiciones de crecimiento. Quizás sienta que es una planta que ha brotado en el desierto o en un suelo rocoso. Se necesita una planta muy especial, y muy fuerte, para sobrevivir en tales condiciones de crecimiento. El sistema de raíces de la planta que sobrevive a circunstancias adversas se extiende, busca y de alguna manera encuentra un buen suelo con suficiente humedad y nutrientes para mantenerse.
Que cada uno de nosotros acepte el desafío de desarrollar un sistema de raíces espirituales que nos permita superar obstáculos y tentaciones. Que crezcamos hasta convertirnos en plantas sanas y prósperas que también den fruto al compartir la Palabra y el amor de Dios con los demás, para que ellos también desarrollen un sistema de raíces que resista las tormentas de la vida.
Oración devocional: Señor, ayúdame a desarrollar un sistema de raíces espirituales fuertes, ya que dependo de Ti para que me ayudes en cada lucha que enfrento, y dame sabiduría y fuerza para dar fruto y ayudar a otros a desarrollar un sistema de raíces espirituales fuertes.