Día 198: Superar la decepción

Escritura de hoy: 1 Crónicas 22:1-23:32

Pensamiento central: Acepta el movimiento de Dios en la próxima generación.

El rey David quería construirle una casa a Dios. Hacía mucho tiempo que soñaba con ello. Pero el Señor le dijo que no se le permitiría construirla. ¡Qué decepción! Su hijo, Salomón, sería el hombre de paz que Dios requería para esta construcción.

Todos sufrimos decepciones. David nos da un ejemplo de cómo manejar una decepción. Otra generación vería las glorias con las que David solo había soñado. Tomó una decisión que tiene una aplicación atemporal. Aunque no vería completado el proyecto, aceptaría el movimiento de Dios más allá de su tiempo.

David se entregó a la obra y ayudó a reunir las cosas necesarias para que su hijo construyera el templo. Habló con Salomón al respecto y tomó medidas para la adoración perpetua de Dios a través de los hijos de Aarón.

David podría haber dicho: «¡Esta próxima generación se va a la ruina! ¡No la apoyaré!». Pero no, depositó sus esperanzas en el hecho de que Salomón seguiría a Dios y haría cosas más grandes de las que él había hecho.

Debemos aprender que puede haber otros más adecuados para un ministerio en particular que nosotros. Debemos apartarnos de la obra de Dios y dejar que Él elija y use a quien quiera. En lugar de criticar a los jóvenes de hoy, acerquémonos a ellos. Serán los líderes del mañana. Nuestras decepciones desaparecerán a medida que ayudemos a otros a cumplir su llamado.

Oración devocional: Señor, ayúdame a animar y guiar para que pueda compartir Tus bendiciones con los demás.

Lectura bíblica de hoy: 1 Crónicas 22:1-23:32; Romanos 3:9-31; Salmo 12:1-8; Proverbios 19:13-14