Día 213: Deseo de la presencia de Dios

Escritura de hoy: Salmo 24:3-6

Pensamiento central: No podemos disfrutar y desear verdaderamente la presencia de Dios cuando albergamos el pecado en nuestros corazones.

La mayoría de nosotros nos hemos enfrentado a momentos en los que la vida no nos ha tratado con amabilidad. Eres afortunado si nunca has pasado por un apuro económico y has tenido que pedir dinero prestado a familiares o amigos. La mayoría de las veces, terminas sintiéndote incómodo al estar cerca de la persona a la que le pediste dinero prestado. No es mucho más fácil ser el prestamista, porque empiezas a preguntarte por qué el prestatario puede permitirse comprar esto o aquello, pero parece tener problemas para devolvértelo. Pedir (o prestar) dinero parece ser un obstáculo para una buena relación.

El salmista reconoció que hay cosas que pueden obstaculizar la relación de un creyente con Dios. Por eso elogia al que tiene «manos limpias y corazón puro», que no eleva su alma a lo que es falso y no jura con engaño» (Salmo 24:4).

¿Significa esto que solo aquellos que son perfectos pueden entrar en la presencia de Dios? Por supuesto que no. Si ese fuera el caso, nadie podría hacerlo. Pero sí significa que no podemos permitir que el pecado quede sin control en nuestras vidas. Debemos confesar nuestros pecados a diario, sabiendo que Dios es fiel y justo para perdonarnos y limpiarnos (ver 1 Juan 1:9). No podemos permitir que la deuda del pecado permanezca y obstaculice nuestra capacidad de disfrutar de nuestra relación con Dios.

¿Sientes que tu deseo de entrar y disfrutar de la presencia de Dios está disminuyendo? Examina tu vida para asegurarte de que tienes «manos limpias y corazón puro». Si no es así, confiesa tu pecado a Dios para que tu deseo de entrar y disfrutar de la presencia de Dios se restablezca y sea más fuerte que nunca.

Oración devocional: Padre Celestial, por favor, límpiameme de todo lo que me impide desear y disfrutar de Tu presencia.

Lectura bíblica de hoy: 2 Crónicas 29:1-36; Romanos 14:1-23; Salmo 24:1-10; Proverbios 20:12

Lo Que Sigue

Nos gustaría que nos des la oportunidad de ayudarte a responder cualquier prgunta que tengas sobre la fe o sobre seguir a Cristo. Tenemos conectores preparados para responderte.