Día 317: Promesa de paz
Escritura de hoy: Ezequiel 28:25-26
Pensamiento central: Así como Dios cumplió sus promesas a Israel, podemos confiar en que Él cumplirá sus promesas a nosotros.
Samuel no tenía planes de fundar una iglesia en el centro de la ciudad cuando se graduó de la universidad. Tenía la intención de trabajar en la iglesia de su padre como pastor asociado y construir su currículum ministerial. Sin embargo, cuando se presentó la oportunidad de fundar esta iglesia en el centro de la ciudad, supo que era de Dios. Pero hacer frente al pago del alquiler de su iglesia en un local comercial con una cuenta bancaria casi vacía estaba poniendo a prueba la fe de Samuel.
Un domingo por la noche, un visitante dejó una ofrenda que no solo pagó el alquiler, sino que aseguró que la iglesia pudiera cumplir con su presupuesto para los siguientes tres meses. Samuel se alegró de que Dios se acordara de esta congregación incipiente y demostrara su fidelidad.
El pasaje de hoy muestra que Dios recordó su promesa a Israel. Aunque la nación sufrió mucho en cautiverio, Él prometió que serían restaurados a su tierra y que una vez más podrían disfrutar de sus vidas allí.
También debemos confiar en que Dios recordará sus promesas hacia nosotros. Podemos sentir como si Dios nos hubiera olvidado de vez en cuando, pero al leer pasajes como este, nos daremos cuenta de que Él no nos olvidará en nuestro momento de necesidad.
Oración devocional: Te alabo, Señor, por tus promesas hacia nosotros.
Lectura bíblica de hoy: Ezequiel 27:1-28:26; Hebreos 11:17-31; Salmo 111:1-10; Proverbios 27:15-16