Día 333: La misericordia y la gracia de Dios

Escritura de hoy: hebreos 4:1-16

Pensamiento central: Jesús, que fue tentado en todo como nosotros, nos ofrece misericordia y gracia a través de la fe.

¿Alguna vez has oído una historia que te haya costado creer? Los israelitas creían en la historia de la tierra de la leche y la miel. Simplemente les costaba creer que Dios pudiera ayudarlos a derrotar a los gigantes que vivían allí. Así que aquellos que no creyeron no recibieron la promesa de Dios. Los israelitas necesitaron fe para entrar en la Tierra Prometida.

A muchos de nosotros nos cuesta perdonarnos unos a otros. Decimos cosas como «no sé por qué la gente hace esto o dice aquello», cuando en realidad nos perturba que el fracaso de otra persona se haya acercado tanto al nuestro. Se necesita fe en los demás para perdonar.

Se necesita fe para creer que un hombre, cualquier hombre, podría vivir en esta tierra durante treinta y tres años y nunca cometer un pecado. Jesús no era solo un hombre o cualquier hombre, era el Hijo de Dios. Aun así, fue tentado de todas las maneras, tal como nosotros somos tentados. Jesús conoce nuestras debilidades; pero si creemos en Él, podemos reclamar la promesa de la misericordia y la gracia de Dios. Podemos tener la promesa de Dios a través de la fe.

Oración devocional: Dios, ayúdame a conocer la alegría de perdonar a los demás.

Lectura bíblica de hoy: Ezequiel 3:16-6:14; Hebreos 4:1-16; Salmo 104:24-35; Proverbios 26:27