Día 94: Dos medidas
Escritura de hoy: Deuteronomio 25:13-16
Pensamiento central: Debemos ser obedientes para proclamar con valentía el nombre de Cristo.
Recuerdo haber visto una comedia hace unos años en la que alguien estaba midiendo grano para pagar. El comprador hacía trampa usando una balanza desequilibrada. Tenía cuidado de ser él quien colocaba el grano en el nivel, pero cuando le daba la espalda, el vendedor colocaba parte del grano y la balanza se volcaba por completo. El hombre fue descubierto como tramposo y se produjeron cinco minutos de alboroto trepidante y lleno de diversión.
Por muy divertido que fuera en la pantalla, es triste cuando se convierte en una representación de nuestra vida cotidiana. A menudo, sin quererlo, tenemos dos normas. Cuando interactuamos con otros creyentes, alabamos con orgullo al Señor por lo que ha hecho por nosotros. Pero cuando interactuamos con no creyentes, tendemos a abandonar nuestro lenguaje lleno de espíritu y guardamos silencio sobre el Señor.
¿Por qué el doble rasero? ¿Tenemos miedo de la persecución? ¿Tenemos miedo de que nos tachen de «fanáticos de la Biblia»?
Cuando Pablo escribió a la iglesia de Éfeso, estaba encadenado por hablar de su fe. Incluso desde su prisión, instó a sus compañeros creyentes a rezar para que siguiera hablando con valentía (véase Efesios 6:20). Pablo no tenía miedo de que lo tacharan de seguidor de Cristo ni de ser hecho prisionero. Lo que más le preocupaba a Pablo era no hablar en nombre del Señor.
Arroja las escamas. No dejes que tu miedo supere el mensaje del amor de Cristo. Empieza este día bendiciendo con valentía a todos los que conozcas. ¡Diles el día glorioso que Dios ha creado solo para ellos! Di una palabra de aliento a todos los que te rodean. Dios bendecirá ese simple acto de obediencia.
Oración devocional: Señor, ayúdame a estar siempre dispuesto a contar a los demás lo que has hecho por mí y lo que puedes hacer por ellos.
Lectura bíblica de hoy: Deuteronomio 23:1-25:19; Lucas 10:13-37; Salmo 75:1-10; Proverbios 12:12-14