El Gran Maestro
Años De Preparación
Jesús adquiere conocimientos acerca de las
necesidades de la gente.
Jesús creció en Nazaret, ciudad de Galilea de unos 15.000 habitantes. Era un lugar de parada en la gran carretera que unía a Jerusalén con los puertos marítimos de Tiro y Sidón. El vicio y el crimen eran tan comunes que la gente decía: «¿Puede salir algo bueno de Nazaret?» Jesús vio la maldad, el egoísmo, la corrupción, la crueldad y la rebelión contra Dios. Vio que los hombres y las mujeres eran esclavos del pecado.
Trabajando Jesús con José en el taller de carpintería podía oír a los hombres hablar de su deseo de liberarse del dominio de los romanos. Pero Jesús sabía que la libertad política no resolvería sus problemas. Lo que el pueblo necesitaba era libertad del pecado que dominaba la vida de todos ellos. El había venido al mundo a traerles esta libertad. Su nombre, Jesús, significa Salvador. El ángel había dicho a José:
Mateo 1:21. «Dará a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados.»
Jesús aprende la Palabra de Dios
Jesús estudió la Palabra de Dios y se preparó para su ministerio. Cuando tenía doce años de edad entendía mejor la Palabra de Dios que sus
maestros. La amaba y siempre la obedecía.
Jesús es bautizado
Cuando Jesús cumplió los treinta años dejó Nazaret para ir de ciudad en ciudad enseñando la Palabra de Dios. Dios lo envió donde Juan el Bautista predicaba. Juan lo bautizó en el río Jordán.
Mateo 3:16-17. «Tan pronto como Jesús fue bautizado, subió del agua. En ese momento se abrió el cielo, y él vio al Espíritu de Dios bajar como una paloma y posarse sobre él. Y una voz del cielo decía: Este es mi Hijo amado; estoy muy complacido con él.»
Ejercicio De Repaso
- 1. Llene los espacios en blanco: «Jesús» significa __________ Jesús fue bautizado en el río ________________ por ________________ el Bautista.
Dios dijo: «Este es mi _______________amado.»
2. ¿De qué salvaría Jesús a su pueblo?
a) Del gobierno romano.
b) De la pobreza y las enfermedades.
c) De sus pecados.
Ungido Para La Obra De Dios
Los profetas, sacerdotes, y reyes eran ungidos con aceite para demostrar que tenían una misión especial que cumplir. El Salvador prometido se llamaba Mesías o Cristo. Ambos nombres significan «ungido». Isaías el profeta escribió acerca de él:
Lucas 4:18-19. “El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para anunciar buenas nuevas a los pobres. Me ha enviado a proclamar libertad a los cautivos y dar vista a los ciegos, a poner en libertad a los oprimidos, a pregonar el año del favor del Señor.”
La profecía de Isaías se cumplió en Jesús. El fue por todas partes predicando las Buenas Nuevas. Tocaba a los enfermos y los sanaba. Los ciegos podían ver. Los cautivos del pecado hallaban libertad. Jesús dijo acerca de la profecía de Isaías: «Hoy se ha cumplido esta Escritura.»
Ejercicio de Repaso
- Aprenda de memoria la profecíade Isaías.
- ¿Qué nombres significan «ungido?» _________ o _________.
- ¿Por qué Jesús podía sanar a los enfermos?
a) Conocía muchos remedios.
b) Había estudiado medicina.
c) El Espíritu del Señor lo ungió para hacer la obra.
Jesús Enseña a una Aldeana
Un viaje a través de Samaria
Jes ̇s escogió a doce hombres para que fuesen sus colaboradores. Los llamamos sus discípulos o alumnos. Dos de ellos, Mateo y Juan, escribieron sobre la vida de Jesús. Juan relata una visita a Samaria.
El camino más breve de Galilea a Jerusalén iba a través de Samaria. Muchos viajeros judíos tomaban el largo camino que la rodeaba, debido al odio que tenían a los samaritanos. Los miraban con desprecio porque eran de una raza diferente y tenían costumbres diferentes. Pero Jesús no tenúa ese sentir hacia los samaritanos. El amaba a todos. Dios había prometido enviar la luz de salvación a todas las naciones. Así que Jesús fue a través de Samaria para llevar la salvación de Dios también allí.
Ejercicio de Repaso
- ¿Era Jesús amistoso con los samaritanos?
a) No. Eran de otra raza y religión.
b) Sí. Jesús amaba a todos.
c) No. Eran muy malvados.
El agua que satisface
Al llegar al poblado de Sicar, Jesús se sentó junto al pozo mientras sus discípulos fueron a comprar alimentos. Cuando una mujer samaritana llegó a sacar agua del pozo, Jesús le pidió agua para beber. Ella se sorprendió de que Jesús le hablase.
Juan 4:10-14. —Si supieras lo que Dios puede dar, y conocieras al que te está pidiendo agua —contestó Jesús—, tú le habrías pedido a él, y él te habría dado agua que da vida.
—Señor, ni siquiera tienes con qué sacar agua, y el pozo es muy hondo; ¿de dónde, pues, vas a sacar esa agua que da vida? 12 ¿Acaso eres tú superior a nuestro padre Jacob, que nos dejó este pozo, del cual bebieron él, sus hijos y su ganado?
—Todo el que beba de esta agua volverá a tener sed —respondió Jesús—, pero el que beba del agua que yo le daré no volverá a tener sed jamás, sino que dentro de él esa agua se convertirá en un manantial del que brotará vida eterna.
Cuando nuestro cuerpo necesita agua, sentimos sed. Nuestro espíritu tiene necesidad de algo, exactamente en la misma medida que nuestro cuerpo necesita agua. Hasta que no lo encontramos, nos sentimos insatisfechos y espiritualmente sedientos.
La mujer samaritana había tratado de hallar satisfacción en el hombre. Se había casado cinco veces, y estaba viviendo con uno que no era su marido. Jesús supo todo lo relativo a ella tan pronto como la vio. Sabía que ella nunca sería feliz mientras sus pecados no fueran perdonados. Así
que le habló de sus pecados. La mujer admitió que todo era exactamente como Jesús había dicho.
La samaritana se dio cuenta de que Jesús era un hombre de Dios, un profeta. Estaba segura de que El podía ayudarla. Preguntó a Jesús cómo se debía adorar a Dios. Aprenda de memoria la respuesta de Jesús:
Juan 4:24. “Dios es espíritu, y quienes lo adoran deben hacerlo en espíritu y en verdad.”
Jesús también dejó que ella supiera que El era el Mesías. ¡Qué feliz se sintió la samaritana al conocer al Salvador! Desde entonces su vida
fue diferente. Corrió para hablar a sus amigos acerca de Jesús. Ellos también necesitaban esa agua viva.
Juan 4:41-42. «y muchos más llegaron a creer por lo que él mismo decía. Ya no creemos solo por lo que tú dijiste —le decían a la mujer—; ahora lo hemos oído nosotros mismos, y sabemos que verdaderamente este es el Salvador del mundo.»
La gente trata de encontrar la felicidad en el materialismo, en el sexo, en las drogas, en la bebida, en la educación, en el poder, en la religión, en las buenas obras, o viviendo en retiro. Nada de esto satisface realmente. Sólo Jesús y su salvación pueden apagar su sed.
Oración
Dios, que me creaste, Tú sabes lo que mi espíritu sediento necesita. Perdona mis pecados. Dame de esa agua viva para apagar mi sed. Enséñame a adorarte en espíritu y en verdad. Déjame encontrar
a Jesús y saber por mí mismo que El es el Salvador del mundo.
Ejercicio de Repaso
- ¿Ha encontrado usted una verdadera satisfacción en Jesús? __________
- ¿Quisiera usted encontrarla? _____________
Jesus Enseña a un Hombre Rico
En una ocasión, un hombre rico vino corriendo a donde estaba Jesús, se arrodilló delante de El, y le preguntó: Maestro bueno, ¿qué debo hacer para recibir la vida eterna? El estaba tratando de ser lo suficientemente bueno como para poder entrar en ese bello hogar del cielo. Aquel hombre
rico no había matado a nadie ni había cometido adulterio. No había robado, ni mentido, ni engañado. Honraba a sus padres.
Realmente era muy bueno, y sin embargo le faltaba algo. Nadie es bastante bueno como para entrar en el cielo. Su pecado era su amor propio. Pensaba más en su propia comodidad que en ayudar a los demás. Amaba más el dinero que a Dios. Necesitaba la salvación tanto como aquella samaritana la había necesitado. Para tener la verdadera felicidad
y la vida eterna, tenemos que poner a Dios en primer lugar.
Marcos 10:21. Jesús lo miró con amor y añadió: «Una sola cosa te falta: anda, vende todo lo que tienes y dáselo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo. Luego ven y sígueme.»
Jesús le habría dado lo que él estaba buscando, la vida eterna, pero el joven rico se fue, triste, sin ella, escogiendo las riquezas de esta tierra en vez de las riquezas del cielo.
Ejercicio de Repaso
- ¿Cree usted que el hombre rico hizo una buena elección? _____________
- ¿Podrá usted, tratando de ser bueno, entrar en el cielo? ___________
Si tiene alguna necesidad espiritual o algún problema, su maestro tendrá gusto en orar por usted.