Lo que es el Matrimonio


El matrimonio es el producto de un plan divino. Los seres humanos no lo idearon o inventaron, Dios lo creó. Dios decidió instituirlo en el jardín del Edén. A través de su Palabra Dios lo afirma y la presencia de Cristo en la boda de Caná lo confirma.

En esta lección estudiaremos en qué sentido la relación entre Cristo y su iglesia se refleja en cada matrimonio fundado sobre principios divinos.

Alguien ha comparado al matrimonio con un módulo que “contiene todas las piezas que deben arreglarse en orden.” Se requiere que se suavicen las partes ásperas, que se peguen, que se martillen un poco, que se les quite el polvo, se enceren
y se lustren. Sin embargo, el resultado es maravillosamente provechoso.

El matrimonio, cuyos efectos perduran para bien, es aquel que se construye según las normas y direcciones que se presentan en la Palabra de Dios.

Matrimonio: Una Institución Divina

Hoy, el matrimonio es la única institución u organización en el mundo que comenzó antes de que el pecado entrara en él. En la Palabra de Dios, la Biblia, leemos:

Y dijo Jehová Dios: No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea para
él. Entonces Jehová Dios hizo caer sueño profundo sobre Adán, y mientras éste dormía, tomó una de sus costillas, y cerró la carne en su lugar. Y de la costilla que Jehová Dios tomó del hombre, hizo una mujer, y la trajo al hombre (Génesis 2:18, 21–22).

Dado con un Modelo a Seguir 

Podemos ver que Dios hizo a Eva para ser compañera de Adán antes de que el pecado entrara al mundo. Por tanto, sabemos que Dios mismo dio al hombre y a la mujer la
relación del matrimonio como parte de su plan perfecto para ellos. Debido a que Dios incluyó el matrimonio dentro de las condiciones perfectas que Él proveyó en el jardín del Edén, podemos aceptarlo como modelo para todos los hombres en todos los tiempos.

Dios se complace con las personas que se casan; sin embargo, Él tiene normas para el matrimonio. Él espera que las personas sigan estas normas y el modelo que proporciona para el matrimonio. Desgraciadamente, el pecado entró en el jardín del Edén. Desde entonces el pecado ha estado torciendo y dañando las muchas bendiciones que Dios le ha dado al hombre. El pecado ha arruinado millones de matrimonios. Si usted desea que su matrimonio sea la relación maravillosa que Dios quiere que usted goce, siga el modelo que Él da en su Palabra, la Biblia.

Hoy, más que nunca, se está atacando la institución del matrimonio y el hogar. Muchos ni siquiera se casan, y substituyen el matrimonio por arreglos temporales para vivir juntos sin casarse. Estos arreglos pueden terminar cuando cualquiera de los dos así lo desea. En muchas partes del mundo, dos terceras partes de matrimonios terminan divorciados. Esta clase de conducta está totalmente en contra del modelo que
Dios da en su Palabra. Él desea que el matrimonio sea una relación en la cual él pueda expresar su amor hacia usted. Esto sólo puede suceder si le honramos buscando su dirección y,siguiendo Su modelo.

La Biblia nos enseña bastante acerca del matrimonio y el hogar. Algunos de los que están estudiando este curso todavía no se han casado. Permita que Dios le guíe en los
planes que usted tiene para su matrimonio. Los que ya están casados encontrarán que este curso puede ayudarles a que su matrimonio sea mejor y más feliz.

Dado para Enseñar Verdades Espirituales

La clase de matrimonio que Dios ha planeado para usted es un cuadro de amor, respeto, unión y compañerismo como el de Cristo y su iglesia. En el Antiguo Testamento, Dios se identifica a sí mismo como el esposo de su pueblo. En el Nuevo Testamento a la iglesia se le llama la esposa de Cristo.

Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne. Grande es este misterio; mas yo digo esto respecto de Cristo y de la iglesia. Por lo demás, cada uno de vosotros ame también a su mujer como a sí mismo; y la mujer respete a su marido. (Efesios 5:31–33)

Matrimonio: Una Relación Especial

El matrimonio es la unión de un hombre y una mujer que moral y legalmente se comprometen para toda la vida, y priva a ambos de tener relaciones con otros. De esta manera se puede establecer un hogar y conservar la familia. Cuando un hombre y una mujer se unen en matrimonio llegan a ser “una sola carne”.

Amor y Compañerismo

Dios dijo que no era bueno que el hombre estuviera solo. Tomó una costilla del hombre e hizo una mujer para suplir al hombre su necesidad de compañerismo.

Matthew Henry escribió que Dios no tomó un hueso del pie del hombre para que él pudiera pisotear a su esposa. Tampoco tomó un hueso de su cabeza para que su esposa lo gobernara. Dios tomó una costilla de Adán, cerca de su corazón, para que así el hombre pudiera proteger a su esposa, amarla y conservarla a su lado.

La felicidad del matrimonio depende del amor y compañerismo que haya entre los esposos. Eva fue parte de Adán. Marido y mujer llegan a ser parte el uno del otro. Sus
vidas se unen en una; la una está incompleta sin la otra. Efesios 5:28 dice: “Los maridos deben amar a sus mujeres como a sus mismos cuerpos”.

Calidad de Padres

El matrimonio concede a la pareja la relación y las responsabilidades de ser padres. Su matrimonio forma un hogar y una familia a donde los hijos pueden nacer y tener el amor y el cuidado del padre y de la madre. Las palabras que Dios les dijo a Adán y Eva demuestran que la paternidad es parte de su plan: “Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla” (Génesis 1:28).

Cuando los niños nacen, los padres tienen la responsabilidad de cuidarlos y proveer una estable y armoniosa vida hogareña. Dios se interesa en que los niños tengan el ambiente apropiado donde puedan crecer y conocerlo. Lea Marcos 10:13–16, lo cual le ayudará a entender la actitud de Jesús hacia los niños.

Matrimonio: Una Unión Sagrada

Un Hombre y Una Mujer

En el mundo no había otras personas, excepto Adán y Eva. Algunos podrían pensar que Dios debería haberle dado a Adán más de una mujer a fin de que el mundo se poblara más rápidamente. Sin embargo, Dios, que siempre sabe más que nosotros, le dio una sola mujer. Este fue el propósito de Dios; éste es el ideal de Dios para el matrimonio. Por consiguiente, para el matrimonio ideal, Dios proveyó una esposa para un hombre.

Por esto el hombre dejará padre y madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne.Así que no son ya más dos, sino una sola carne; por tanto, lo que Dios juntó, no lo separe el hombre. (Mateo 19:5–6)

Cristo dijo que un hombre y una mujer llegarían a ser uno. Sean cuales fueren sus costumbres, esta es la enseñanza de la Biblia. En algunas partes del mundo, las costumbres permiten que un hombre tenga más de una esposa. En algún otro país
la costumbre es que una mujer tenga más de un esposo. En otras áreas del mundo, todos los hijos de la misma familia se casan con la misma mujer. Aun otras personas en otros lugares del mundo tienen la costumbre de intercambiar esposas. Otros viven juntos sin casarse. Como usted se dará cuenta, las costumbres no son una guía para la verdadera clase de matrimonio. Para esto, tenemos que acudir a la Biblia.

Las Leyes de Dios Para Esta Unión

Jesús enseñó que nada debe romper esta unión o unidad de un hombre con su esposa. Cuando Dios dio las leyes a Moisés, las cuales conocemos como los Diez Mandamientos, incluyó leyes contra los pecados que destruyen la unión de un hombre
con su esposa: “No cometerás adulterio. No codiciarás la mujer de tu prójimo” (Éxodo 20:14, 17).

Cualquiera de los dos cónyuges que tiene relaciones sexuales con otra persona que no es su esposo o esposa rompe las leyes de Dios y comete adulterio. Esto es inmoral. Aun el desear a la esposa de otro es pecado. “Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón” (Mateo 5:28). El Nuevo Testamento también recalca las advertencias de Dios contra la inmoralidad. Honroso sea en todos el matrimonio, y el lecho sin mancilla; pero a los fornicarios y a los adúlteros los juzgará Dios. (Hebreos 13:4)

Matrimonio: Su Importancia Para el Mundo

Al revisar esta lección usted puede darse cuenta de que el matrimonio es parte del plan de Dios para la humanidad. Cuando seguimos las enseñanzas y el modelo para el matrimonio, podemos tener un hogar feliz. Nuestras experiencias en el hogar nos ayudarán a entender mejor estas verdades espirituales.

El propósito de Dios es que esposo y esposa, padres e hijos, encuentren en la familia amor, compañerismo y preocupación mutua por sus necesidades.

Dios también ha establecido que la familia sea la unidad básica de la sociedad. Sus leyes imponen las normas morales por medio de las cuales deben vivir hombres y mujeres. Aquellos que vienen de hogares felices son los que aprenden a vivir juntos en paz, y son aquellos que congenian más con los demás. Las comunidades que son mantenidas en alta estima son aquellas formadas por familias honorables y honradas. Buenas familias hacen buenas comunidades, y buenas comunidades hacen buenas naciones.

¡Qué importante es, entonces, que cada familia acepte las leyes de Dios y se guíe por sus normas para obtener felicidad! ¡Cuán importante es guardarse en contra de aquellas cosas que podrían arruinar el hogar! ¡Y qué importante es que usted
aprenda lo que Dios dice acerca de su familia! Que el Señor lo bendiga a medida que estudia y pone en práctica lo que aprende en cada lección.

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