Su nueva vida 3: Su Padre le está hablando

¿Cómo es que la oveja sabe cuándo apacentar en las colinas y cuándo volver al rebaño? ¿Cómo evita seguir a un extraño? La oveja es dirigida y protegida cuando escucha la voz de su pastor. Porque el pastor ha cuidado de la oveja desde que era cordera, la oveja conoce su voz. No seguirá a ningún otro.

De ciertas maneras, nuestra relación con Dios es como la de una oveja con su pastor. Dios quiere dirigirlo y cuidar de usted. Él le habla todos los días para guiarlo y protegerlo del peligro. Al ir escuchando su voz, usted podrá reconocerla más. Usted sabrá qué cosas correctas debe hacer aunque otros traten de confundirlo.

Esta lección le ayudará a entender cómo es que Dios le habla. A veces Él le hablará directamente. A veces Él usará su Palabra, la Biblia. Y otras veces, Él usará a otro cristiano.

Al estudiar esta lección, usted descubrirá cómo reconocer la voz de su Padre, no importa cuál método Él escoja.

Dios quiere hablarle

¿Qué padre no disfruta de hablar con sus hijos aún cuando ellos son bebés y apenas pueden sonreír en respuesta? A su Padre celestial también le gusta hablar con sus hijos, mostrarles su amor, enseñarles y ayudarles con sus problemas. ¿Le gustaría oír su voz?

Dios habla de muchas maneras

Hebreos 1:1–2 dice:

Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por los profetas, en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo.

Las siguientes son algunas de las maneras en que Dios le habla.

Directamente a su corazón

El Espíritu Santo le da a conocer la presencia de Jesús. Él puede hablarle mediante la conciencia, haciendo que sienta lo que debe hacer o advirtiéndole de algo que no debe hacer. Él puede esclarecerle una verdad espiritual. O usted puede sentir una profunda impresión de que Dios quiere que usted haga algo. Cuando ore, pídale a Dios que le hable y espere oír su voz en su corazón.

Mediante sus bendiciones

Muchos cristianos dicen que el mundo entero les parece diferente desde que nacieron de nuevo. Usted también podría tener un nuevo aprecio por las bendiciones de Dios al mirar a su alrededor. Puede sentir su presencia en las maravillas de la naturaleza. Él le habla mediante la música y el arte. Usted lo siente cerca en la cálida amistad de otros cristianos. Miles de bendiciones a su alrededor le hablan de la bondad de Dios. Él le habla en las respuestas a sus oraciones. Mediante la fe, usted lo oye a Él decirle: “Te amo y quiero bendecirte”.

Mediante otros cristianos

A veces los hijos mayores de la familia les dicen a los menores: “¡No, no! ¡A mami no le gusta eso!” O: “Mira, esto es lo que Papi quiere”.

Dios también les habla a sus hijos mediante los hermanos mayores en el Señor. Él quiere que nos reunamos a menudo con otros cristianos para poder usarlos para que nos alienten, nos dirijan y nos ayuden. Pablo nos dice: “Someteos unos a otros en el temor de Dios” (Efesios 5:21).

Mediante los dones espirituales y el ministerio

El Espíritu Santo ha dado a la iglesia muchos dones espirituales diferentes. Él nos habla mediante ellos. Él da el mensaje de Dios para la iglesia a los pastores, maestros, evangelistas y escritores. Él quiere usar a todos los cristianos para que hablen acerca de Dios. Es importante que usted asista a las reuniones de la iglesia tan a menudo como pueda. Cada vez que vaya, oiga lo que su Padre celestial quiere decirle. Jesús enseñó que “donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos” (Mateo 18:20).

Mediante los cánticos

Dios a menudo le hablará mediante las palabras de algún cántico o coro espiritual. Usted se sorprenderá cuán a menudo Él le trae a la mente las palabras de algún canto en el momento preciso en que necesita su mensaje. Es por eso que Pablo instó a los creyentes en Éfeso:

Sed llenos del Espíritu, hablando entre vosotros con salmos, con himnos y cánticos espirituales, cantando y alabando al Señor en vuestros corazones. (Efesios 5:18–19)

Mediante la Biblia

Dios le habla mediante su libro, la Santa Biblia. Esta es la manera más segura de conocer su mensaje. Quizás el pastor no siempre sepa cuál es la voluntad de Dios para usted. Sus hermanos en Cristo podrían darle consejo equivocado. Los sueños y visiones no siempre son de Dios. Pueden venir de lo que usted ha estado pensando o de su subconsciente. Usted podría sentir que Dios quiere que haga algo cuando es sólo su propio deseo lo que lo insta a hacerlo. Entonces, ¿cómo puede conocer la voz de Dios?

Usted tiene el mensaje de Dios escrito para usted en la Biblia. Usted debe comprobar todo lo demás con lo que Dios le dice en la Biblia. Es por eso que es tan importante estudiar la Palabra de Dios como lo está haciendo ahora. Mediante estos estudios básicos entenderá mejor la Biblia. Aprenderá cómo poner en práctica sus enseñanzas en su vida.

Abre mis ojos, y miraré las maravillas de tu ley. (Salmo 119:18)

Para siempre, oh Jehová, permanece tu palabra en los cielos. (Salmo 119:89)

Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino. (Salmo 119:105)

La exposición de tus palabras alumbra; hace entender a los simples. (Salmo 119:130)

La suma de tu palabra es verdad, y eterno es todo juicio de tu justicia. (Salmo 119:160)

Dios tiene un libro para Usted

Cómo fue escrito el libro de Dios

La Biblia se compone de sesenta y seis libros diferentes. Durante un período de alrededor de 1.600 años, unos cuarenta hombres escribieron estos libros. Éstos fueron hombres que Dios escogió, y Él envió a su Espíritu Santo para ayudarles a saber lo que debían escribir. Como resultado, tenemos el mensaje de Dios para nosotros. Juntos, los sesenta y seis libros se llaman las Sagradas Escrituras. Todos concuerdan perfectamente entre sí. Desarrollan el mismo tema en tal unidad que sabemos que han provenido de un solo autor, Dios.

Las personas piadosas reconocieron la cualidad especial de los sesenta y seis libros que Dios había inspirado. Unos doscientos años después del nacimiento de Jesús, ellas reunieron los libros en un solo libro, la Santa Biblia. Santa Biblia quiere decir los libros de Dios. Los primeros treinta y
nueve libros fueron escritos antes del nacimiento de nuestro Señor Jesús. Estos se llaman el Antiguo Testamento. La segunda parte de la Biblia se llama el Nuevo Testamento. En éste hay veinte y siete libros escritos después que Jesús vino a la tierra e hizo un nuevo pacto entre Dios y los seres humanos. Estos libros nos dan los términos de este pacto.

La mayoría del Antiguo Testamento primero fue escrito en hebreo, y el Nuevo Testamento en griego. (Una pequeña parte del Antiguo Testamento fue escrita en arameo.) Dios nos ha dado su libro para toda la humanidad y quiere que todos lo lean. Actualmente la Biblia se ha traducido a unos 405
idiomas, y algunas porciones de la Biblia se han traducido a 2.303 idiomas.

En algunos idiomas hay varias traducciones o versiones de la Biblia. Algunas de ellas son evangélicas y otras católicas, pero básicamente dicen la misma cosa.

Las citas del Antiguo Testamento y del Nuevo Testamento en estas lecciones se han tomado de la versión ReinaValera 1960.

Citas bíblicas

Cada libro de la Biblia está dividido en capítulos enumerados. Los capítulos se dividen a su vez en pequeños párrafos llamados versículos. Estos versículos están enumerados para poder saber exactamente dónde encontrar lo que estamos buscando en la Biblia. Si quiere anotar dónde se encuentra cierto pasaje en la Biblia, usted escribe primero el nombre del libro, luego el número del capítulo seguido por dos puntos (:) y el número del versículo. Juan 3:16 se refiere al libro de Juan, capítulo 3, versículo 16.

Para referirse a dos o más versículos que no son consecutivos, sepárelos con comas. Juan 3:16, 18, 20 significa Juan, capítulo 3, versículos 16, 18 y 20. Esta es una cita bíblica.

Un guión entre dos números (–) significa que están incluidos todos los versículos en medio de esos números. Juan 3:16–22 significa Juan, capítulo 3, versículos 16 al 22.

Al referirse a versículos en diferentes capítulos, use punto y coma (;) para separar las referencias. Juan 3:16; 6:24 significa Juan, capítulo 3, versículo 16; y Juan capítulo 6, versículo 24.

Cómo oír la voz de Dios

Antes de ponerse a escuchar cierta estación radial, usted debe sintonizar la frecuencia. ¿Cómo puede usted sintonizar su espíritu para oír la voz de Dios? Estas son algunas formas de hacerlo.

• Lea la Biblia cada día.
• Piense continuamente en lo que ha leído en la Biblia. Medite en las Escrituras.
• Haga un hábito de leer y memorizarse los versículos bíblicos que le gustan.

Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de
Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra. (2 Timoteo 3:16–17)

Si usted está comenzando a leer la Biblia por primera vez, empiece con el Evangelio de Marcos en el Nuevo Testamento. Dios le hablará claramente a través de la vida de Jesús y sus enseñanzas. Usted aprenderá más sobre el nuevo pacto que el Señor ha hecho con nosotros antes de estudiar el Antiguo Testamento.

Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por los profetas, en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo. (Hebreos 1:1–2)

• Asista a la iglesia regularmente con el fin de oír a Dios.

• Ore todos los días. Pídale a Dios que le hable. Cuando ore, usted puede cerrar los ojos para no pensar en las cosas a su alrededor.

• No pase todo el tiempo hablándole a Dios. Espere en silencio que Él le hable a su corazón.

• Entone cánticos evangélicos y piense en las palabras.

• Ejercítese en la búsqueda de la bondad, del poder y del amor de Dios a su alrededor.

• Lea literatura cristiana y escuche programas de radio evangélicos cuando pueda.

• Hable de Dios y su Palabra con otros cristianos.

• Haga lo que Dios le dice. Recuerde que para que Él lo dirija, usted debe estar dispuesto a seguirlo.

• Estudie fielmente las lecciones de este libro y otros estudios bíblicos, y pídale a Dios que le hable a través de ellos.

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